Durante el transcurso de la cena se nombraron Embajadores de Buena Voluntad a la empresaria de los Emiratos, Meryam Salman Alqaysi, la cantante del tibetana Yungchen Lhamo y el cantante de Syria, Adal Jarrah, que también deleitaron a los asistentes con su voz.

La cena fue un viaje culinario por la gastronomía árabe y fue amenizada por un grupo de músicos marroquíes finalizando con un breve discurso de agradecimiento de la Princesa Beatrice de Orleans. Un canto por la paz, ofrecido por Yungchen Lhamo, cantante Tibetana, acompañó a los asistentes durante esta mágica velada de fusión cultural.